lunes, 28 de julio de 2014

Será mi fin...

Debería morir, alcanzar ese paraíso del que tanto me alejo.
Intentar besar el cielo y que mis demonios me arrastren a los confines del infierno. A la desolación definitiva de mi alma, al fuego para consumirme una y otra vez en el dolor.
No me quedan ángeles a los que acudir. Solo demonios de los que aceptar sus besos.
Nunca quise esto, ser yo. Puedes pensar que soy feliz, pero antes de hacerlo pateame en el suelo. 
No entiendo como he llegado aquí sin quererlo. Pero nadie se dará cuenta de que me he ido cuando lo haga.
Acabaré por ser la persona que nunca quise ser, pero eso siempre se supo y no tiene remedio.
Nunca quise quedarme. 
Pero todo esto; no hoy, algún día, será mi fin.

sábado, 12 de julio de 2014

Tú.

Tú, devuelves poco a poco la sangre a mis venas secas. Y las fuerzas a mi corazón débil y vacío.
Mi luna de las noches de julio en un pueblo desierto. Mi esperanza; mi  razón como humano, que algún día se verá cara a cara con la muerte, para creer que podías quererle como tu amigo propio y personal.
No se pensar en que me quieras. Pero tampoco sé entender que lo hagas si es así.
Quizás me equivoque, probablemente no me entiendas.
Calma mi conciencia, alarga mis días, tenme paciencia. Tus ojos enamoran a este filósofo de bar desventurado. Y tus palabras ciegan a este negligente enamorado de una vida dolorida

lunes, 16 de junio de 2014

De amor también se muere... Más o menos

Dieciocho de junio de 2013. 7:00 a.m
Acabo de despertarme, y todo sigue igual. Soñé contigo, estuve vivo durante esas cuatro horas que logré dormir solo porque tú estabas ahí. Ahora he abierto los ojos y nada ha cambiado. La lluvia cae con gran velocidad fuera de mi ventana y algunas gotas acarician el cristal, mientras que tras mi ella veo los árboles movidos por el viento; veo avanzar el reloj, tan lento como el primer día en que ya no estabas aquí. Los minutos son interminables horas de viajes en el tiempo a través del difuso recuerdo de tu mirada. De pronto, nada de lo que hago tiene sentido, ni mi respiración me es necesaria solo porque las ganas que alguna vez tuve de vivir te las has llevado junto con mi alma y mis deseos, algo lógico, supiste volverte la dueña de todo lo que fui.
Me he levantado, aunque mis ganas de hacerlo eran nulas, me he visto obligado a hacerlo. Bebo mi café, con música en los oídos para que las palabras que utilizaste de puñales no resuenen en mi cabeza. No poseo ánimo ninguno de asistir a clase y mucho menos de ver a nadie, no quiero estar encerrado una mañana entera; pero es irónico, me tienes prisionero.
Voy caminando por la calle, viendo mil y un lugares que me traen recuerdos los cuales mi mente desearía borrar. Ahí estás, casi en cada esquina, conmigo, pero ahora sin mi. La lluvia cae sobre mi mientras camino sin rumbo, perdido; mis lágrimas se camuflan con el agua de la lluvia pero no veo a nadie en la calle, camino solo por este sendero de recuerdos desechos mientras la niebla lo cubre todo.
Por un momento te veo al final de la nubosa carretera, llamándome. Corro hacia ti, y el camino se hace mas largo a cada segundo que pasa. Te alcanzo y, de pronto... Estoy en el suelo, veo mi sangre esparcirse por el pavimento, tengo sueño, mis ojos se cierran, mi calma aumenta...
Sala de urgencias. 8:37 a.m.
La enfermera grita: ¡Dejen paso, dejen paso!
Pienso en ti, cada segundo mil recuerdos que protagonizas azotan mi mente. Y me duermo...
La doctora dijo: Lo perdimos. Hora de la muerte: 8:41 a.m.
Fuiste mi vida pero la triste causa de mi muerte.
¿Quién dijo que no se muere por causa del amor? Sea quien fuere, estaba equivocado.

lunes, 14 de abril de 2014

Estoy aquí

Estoy aquí. Sentado en la oscuridad, en el borde de tu mirada, observando el vacío. Preguntando por el sentido de una vida sin ti a esa estrella solitaria que un día fue mi corazón.
Sigo aquí sin respuesta alguna, como una sombra sin alma en una ciudad sin corazón camino por aquellos lugares en los que te veía, eliminando recuerdos y levantando murallas para proteger lo que me queda de vida.
He caminado tanto pensando en ti que, sin darme cuenta, estoy de pie al borde de los confines de la tierra mientras que mi alma, sin ser mas que una sombra, deambula alrededor de tu sonrisa.
Me desvanezco, como mi amor por ti. Lo que alguna vez fui se ha quedado contigo y yo ya me fui, sin conocerme y escondiendome tras mis murallas, pero ya no quiero seguir ahí.
Por lo menos no me siento tan vacío. Y el único momento en que volveré a ese abismo será cuando te vea, siempre de lejos pero contigo, recordando el suave tacto de tus manos y tu delicada sonrisa. Sin embargo, se que cada día te buscaré entre la gente, aunque mi alma se retuerza en mi pecho, intentaré verte.
Seguiré caminando, levantando mi muralla entre la gente, atravesando la ciudad e intentando verte.

lunes, 24 de marzo de 2014

Una noche lluviosa de abril.

No quiero hacer algo perfecto, solo quiero hacer lo que me gusta lo mejor posible de forma real.
No hay nada perfecto, lo único perfecto que he visto es la sonrisa de aquella que se quedó con mi corazón y nunca me lo devolverá.
Lo único aún mas perfecto que he visto son sus manos, sus manos suaves y delicadas cuando me rozaban.
Lo mejor que jamás sentí, fue esa sensación de fortaleza y debilidad sabiendo que ella, de algún modo, era mía.
Lo mas real que he vivido fueron esos momentos que ahora, tristemente, solo forman parte de un recuerdo del cual tengo miedo. Tengo miedo de recordar lo que perdí y lo que intento olvidar. Lo mas real que he vivido fue ese sentimiento por el cual uno pierde la cabeza, ese que algunos consideran inexistente  y yo por ella sentí de verdad, ese llamado amor.
Si alguna vez hice algo bien ella fue quien lo causó, y, si he hecho algo mal, fue dejarla ir aquella lluviosa noche de abril.

domingo, 23 de marzo de 2014

Eres

Eres. Mi sol, mi cielo, mi luna, mis estrellas.
Eres, cada ínfima parte de mi mundo, cada detalle, cada parte de algo mío.
Eres todo lo que quiero y lo que necesito porque
todo lo que busco está en ti, todo lo que quiero vivir.
Eres incluso, de la forma mas hermosa, aquello que no me hace bien.
Eres la culpable de mi esperanza, la culpable de mis desvelos y el artífice de mi inspiración.
Aunque humana, perfecta. Aunque efímera, eterna.
Eres, ese pensamiento eternamente redundante que atraviesa mi cabeza día y noche.
Eres incluso aquello que no eres en este mundo, pero eso me hace feliz.
Eso me hace feliz porque lo que no eres en este mundo lo eres en el mío.
Eres, simplemente eres, y lo eres para mi.

viernes, 21 de marzo de 2014

¿Que significa el amor?

Contestame a una pregunta:
¿Que significa el amor?

El amor, el amor... el poder de volar,
las ganas de vivir, las ganas de soñar y las de reír.
Aquello que todos buscan y muy pocos encuentran,
eso, es el amor. Es algo que muchos lo consideran efímero,
y yo lo considero algo trascendental.
Como Romeo y Julieta, le da sentido a la vida
y hasta puede quitartela.
Es lo que hace que el mundo gire,
lo que alimenta la esperanza en un mundo gris y sombrío.
Es ese "algo" que nos permite suspirar acompañados de la esperanza,
aquello capaz de cambiar nuestro mundo.
Nos hace volar.
Por él reímos, lloramos y nos desvelamos.
Por el amor llegamos a nuestros extremos y los sobrepasamos.
El amor puede volver loco al hombre más cuerdo,
y volver tonto al ser más inteligente.
¿Porqué lo buscamos? No lo sé,
solo sé que luego de encontrarlo pocos pueden vivir sin él.
Nadie quiere vivir sin él.
No sentir amor, no enamorarse, no conocer la pasión que conlleva,
podría considerarse un pecado contra la vida.
Hay muchos más motivos.
Pero es lo que yo creo, aún así, este amor del que hablo siempre ha estado entre los más buscados.